Dº. José Perol Álvarez y Dª. Pilar Caldelas Duarte tienen su primer contacto con el mundo funerario cuando, en 1982, comienzan a trabajar en una conocida firma de fabricación de ataúdes, como carpintero-barnizador y tapizando féretros respectivamente.
Debido a que el barniz resultó ser muy dañino para la salud de D.José, abandonan la carpintería para dar lugar a un proyecto lleno de personalidad propia.
En 1989, nace en Padrón (A Coruña), "Acolchados Calpep", destinada a la fabricación de tapizados y acolchados para ataúdes, convirtiéndose así, en los PIONEROS de la confección de tapizados para féretros tal y como se entienden hoy día, como una prenda independiente, puesto que hasta ese momento, el ataúd se revestía en las propias fábricas adaptando manualmente rollos de tela, rasos, puntillas, así como galones y otros adornos y detalles.
En nuestro inicios, hemos contado con la experiencia adquirida años atrás, con el profundo conocimiento del producto, así como la ilusión y deseo para que dicho proyecto fuese una realidad, basado en un continuo esfuerzo, constancia, trabajo y un ansiado afán de superación, así como la confianza y apoyo que nos otorgaron los que se cruzaron en nuestro camino.
En la actualidad, con la incorporación de la segunda generación, y ayuda de todos los que nos acompañan en esta ardua tarea: empleados (los actuales y los que lo han sido), clientes, proveedores y todos los que alguna ocasión formaron parte de este equipo, hemos crecido como empresa, ampliado el lugar de trabajo con las naves industriales en A Estrada e introducido novedades y mejoras en el sistema de fabricación.
La suma de todo ello es el resultado de una firma seria, con calidad, buena confección y sobre todo, rapidez en el servicio, logrando así, que "Calpep" sea ya un referente del sector en el mercado nacional.